El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado recientemente la cifra definitiva de inflación para 2024, establecida en un 2,8%. Esto ha permitido a la Seguridad Social confirmar el incremento que experimentarán las pensiones a partir de enero de 2025.

Los autónomos, un colectivo clave en la economía española, verán reflejados estos cambios en sus prestaciones, tanto en las pensiones máximas como en las medias, de acuerdo con las disposiciones actuales.

Revalorización general de las pensiones

A partir de enero de 2025, las pensiones contributivas, que incluyen jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y favor de familiares, subirán un 2,8%, alineándose con la inflación. Esto representará un incremento medio de 340 euros anuales para los trabajadores por cuenta propia. En cifras mensuales, las pensiones medias se ajustarán de la siguiente manera:

  • Pensión de jubilación: De 967 a 994 euros (+27 euros al mes).
  • Incapacidad permanente: De 890 a 915 euros (+25 euros al mes).
  • Viudedad: De 651 a 669 euros (+18 euros al mes).
  • Orfandad: De 413 a 424,6 euros (+11,6 euros al mes).
  • Favor de familiares: De 568 a 584 euros (+16 euros al mes).

Estas cifras confirman una mejora en las condiciones de los autónomos jubilados, aunque la mayoría de ellos sigue percibiendo pensiones inferiores a la media de otros regímenes contributivos.

Subida de la pensión máxima

Uno de los aspectos más destacados es la revalorización de las pensiones máximas. En 2024, el límite estaba fijado en 44.450,56 euros anuales, y se prevé que en 2025 ascienda un 2,915%, según lo estipulado en la Ley General de Seguridad Social (LGSS). Este incremento incluye la inflación del 2,8% más un 0,115% adicional, aplicable de manera acumulativa hasta 2050. Así, la pensión máxima pasará a ser de 45.689 euros anuales, lo que equivale a 3.263 euros mensuales con 14 pagas, o 3.807 euros mensuales en caso de prestaciones calculadas con 12 pagas.

¿Qué implica esto para los autónomos?

Las pensiones contributivas dependen de las bases de cotización, y los autónomos que hayan cotizado por las bases más altas podrán beneficiarse de este nuevo límite. No obstante, muchas pensiones, como las de viudedad y orfandad, no alcanzarán estos topes debido a los porcentajes aplicados sobre las bases reguladoras.

Hacia un futuro con más ajustes

Cabe destacar que, aunque el Gobierno todavía no ha publicado los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2025, podrían incluir ajustes adicionales que eleven el límite máximo de las pensiones. La disposición transitoria trigésima novena de la LGSS establece un marco de referencia, pero los PGE podrían modificar estas previsiones.

En resumen, el año 2025 traerá mejoras significativas para los pensionistas autónomos. Las subidas previstas buscan garantizar el poder adquisitivo frente a la inflación y avanzar hacia un sistema más equitativo. Sin embargo, el reto de lograr pensiones dignas para todos los autónomos sigue siendo una asignatura pendiente en el marco del sistema de protección social español.encia y aprovechen todas las herramientas disponibles para reducir su carga tributaria.

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