Un punto de partida para la valoración puede ser considerar los criterios establecidos en el artículo 16 de la Ley del Impuesto sobre el Patrimonio. Aquí, te contamos en qué situaciones necesitas valorar acciones o participaciones.
La determinación precisa del valor de estas unidades es esencial para garantizar transacciones justas y equitativas, ya sea en ventas de acciones y participaciones, sucesiones familiares, fusiones, adquisiciones, emisión de nuevas acciones o la disolución de empresas. No obstante, este proceso puede ser un laberinto de complejidades debido a la falta de un enfoque único.
En el artículo 353.1 de la Ley de Sociedades de Capital se establece una guía fundamental:
En caso de desacuerdo entre la empresa y los accionistas en lo que respecta a la valoración de acciones o participaciones; un experto independiente designado por el registrador mercantil del domicilio social de la empresa intervendrá para llevar a cabo la valoración. Esto sucede cuando surgen cuestiones sobre el valor justo de las acciones, las personas encargadas de la valoración o el procedimiento a seguir.
¿Por dónde empezar? Un punto de partida para la valoración puede ser considerar los criterios establecidos en el artículo 16 de la Ley del Impuesto sobre el Patrimonio. Aquí, te contamos en qué situaciones necesitas valorar acciones o participaciones:
1. Transmisión de acciones o participaciones: Imagina que un accionista decide vender sus participaciones en la empresa; es vital determinar su valor para lograr una transacción justa.
2. Cesión de acciones o participaciones a herederos: En empresas familiares, la sucesión del fundador es un momento crítico. La valoración es esencial para asuntos hereditarios y fiscales.
3. Incorporación de nuevos socios mediante ampliaciones de capital: Cuando una empresa integra un nuevo socio, es necesario determinar el valor de las acciones o participaciones asignadas.
4. Fusiones: Las fusiones requieren conocer el valor de las acciones o participaciones de la empresa absorbida y de la absorbente.
5. Emisión de nuevas acciones o participaciones: Cuando una empresa emite nuevas acciones o participaciones, es necesario establecer su valor.
6. Liquidación de la empresa: En caso de liquidación, se debe determinar el valor de las acciones o participaciones de los socios para distribuir el patrimonio neto de manera justa.
En la Ley del Impuesto sobre el Patrimonio se definen métodos específicos para la valoración de participaciones en cooperativas y otras entidades. Estos métodos pueden basarse en el último balance aprobado, el valor nominal o la capitalización de beneficios anteriores. En todos los casos, las entidades deben proporcionar certificados de valoración a los socios o partícipes.
Además de los métodos establecidos por la ley, existen enfoques más complejos que consideran factores como el valor de mercado de activos y pasivos, o los flujos de caja futuros esperados de la empresa.
En resumen, la valoración de acciones y participaciones en empresas es esencial en diversos escenarios. La elección del método adecuado dependerá de las circunstancias específicas de cada caso. Es crucial entender las regulaciones legales y fiscales que rigen estas valoraciones y buscar orientación profesional para evitar problemas tributarios. ¡No subestimes la importancia de la valoración en tu estrategia empresarial!
Desde FAR Asesores, ponemos a su disposición un equipo profesional que pretende dar respuesta a las exigencias legales, fiscales y económicas, que su empresa afronté. Esta noticia está elaborada a través de un articulo de la Revista Fiscal e Impuestos, puedes leer la noticia completa en el siguiente enlace.
Foto de Anna Tarazevich.